Igual
que uno necesita tranquilidad para dormir, o
moverse para entrar en calor, bueno,
tambien necesitamos atención para
aprender, interés para atender y memoria
para recordar, sin esas funciones cognitivas no será
posible lograr un correcto proceso de aprendizaje. Es por eso que
activar las áreas cerebrales encargadas de esas funciones es
imprescindible. Producto del encierro en casa a raiz de la pandemia
del covid 19, es que uno de mis principales preocupaciones tanto para
conmigo como para con mis hijos ha sido mantenernos fisica y
mentalmente activos dia a dia, el tema de la psicomotricidad, de que
se muevan a diario es intransable, y con la ayuda de una
planificación ha sido posible lograrlo, realizamos actividades ya
sea de motricidad gruesa como de motricidad fina constantemente,
ellos no se dan cuenta, pero yo lo intenciono, con el único objetivo
que estén mas activadas las zonas del cerebro encargadas de
aprender, y cuando hablo de aprender, me estoy refiriendo
especialmente a todo lo que sucede alrededor de la vida de un niño,
de todo se puede aprender! de lo que veo, de lo que oigo, lo que
juego, de lo que hago con alguien cuando colaboro, de lo que descubro
en los momentos de soledad, de lo que invento, lo que toco, etc...
Pero,
¿por qué el movimiento es clave para aprender? Gracias a las
neurociencias se ha podido confirmar que el movimiento promueve la
liberación de ciertos neurtransmisores que actúan en los procesos
de aprendizaje tales como la memoria y la atencion, entre otros.
Ahora, por movimiento tenemos que recordar que los hay lentos y
delicados, controlados y pequeños, como también hay otros
acelerados, grandes y libres, entonces saber realizarlos y cuál es
el momento adecuado es lo mas complicado para poder planificar, mas
aun en un contexto de encierro y estrés en que se hace lo que se
puede y cuando se pueda en EL ESPACIO que se tenga, y más dificil
todavía en el caso de menores con TDAH, que lo único que buscan es
moverse y moverse sin fin, sin razón..
Moverse
despierta nuestro cerebro, mas bien lo prepara para la acción. Asi,
si realizamos un determinado tipo de movimientos antes del momento de
aprender será propicio pues estaríamos activando el área de la
atención --zona prefrontal-- debido a la liberación de dopamina y
noradrenalina, además del incremento en los niveles de oxígeno lo
cual será óptimo para dejar al alumno preparado, atento..; por el
contrario, si realizo determinados ejercicios después de una
experiencia de aprendizaje podríamos activar la zona del hipocampo
--ampliando su volumen-- (otro acierto de las neurociencias),
favoreciendo así la consolidación de los contenidos debido
básicamente a la baja en los niveles de cortisol, promoviendo un
estado de relajo y bajo estrés.
Ya
sabemos entonces que el momento de la práctica de ejercicio y
actividad fisica gruesa o fina es determinante para definir la
calidad de un aprendizaje, activar a un niño a entrar a una sesion
de telecolegio, o relajar y felicitar a un estudiante al finalizar la
sesión remota estaría cooperando con el proceso.
A
mas espacio podremos realizar ejercicios de motricidad gruesa tales
como saltar la cuerda, jugar al luche, tirar la cuerda, hacer
volteretas, jugar a chutear la pelota, hacer rebotes, carreras de
velocidad o con implementos, baile, hacer la cama, vestirse solo,
trasplantar, barrer, enrollar la manguera, mover bolsas, hacer la
cama, etc.. ayudará a despertarlos.
A
menor espacio podemos realizar motricidad fina o movimientos mas
pequeños, tales como colorear, troquelar, delinear, pegar piezas
pequeñas, hacer figuras con plasticina, trasvasijar, agrupar
calcetines, cocinar, poner la mesa, sacudir, regar plantitas, bordar,
yoga, pilates, entre otras, tambien estarán cooperando con la
relajacion. Según la tarea de aprendizaje que se deba realizar será
la actividad psicomotora que se elija y cuándo. A nuestros alumnos a
veces necesitamos relajarlos (motricidad fina) para poder hacer
ejercicios de matemáticas, como otras veces necesitaremos llevarlos
al patio a correr para despertarlos y luego poder hacer ejercicios de
creación, de diálogo y argumentación, de trabajo grupal, de
intercambio, etc..
Recientes
estudios revelan que movimientos mas precisos y lentos (precisamente
ahora que estamos en espacios reducidos, confinados) colaborarían a
mejorar la actividad simboólica! tales como son la lectura, la
escritura y el cálculo; movimiento mas gruesos y libres
colaborarían con creatividad, invención, diseño, pensamiento,
ideas.. gracias a los neurotransmisores que se estarían liberando.
Por
lo tanto tenemos una buena noticia! Si deseamos que nuestros niños
se calmen, basta con ofrecerles un ambiente, materiales e ideas de
juegos de movimientos que requieran motricidad mas fina para que
liberen un tipo de neurotransmisores que relajan y calman; por el
contrario si necesitamos despertar a nuestros niños les ofreceremos
juegos mas libres y que impliquen moviemientos gruesos involucrando
todo el cuerpo, lo que ayudará a dejarlos mas atentos (NA/DA).
Ahora, está en nosotros reconocer al observarlos, el ver cómo están
si acelerados y muy relajados y si ese estado favorecerá o no a la
actividad a realizar, en el tipo de movimiento que les ofrezcamos
está la solución.